Realmente hay peligros para México

Realmente hay peligros para México, pero son:

-Quienes quisieran convertir a nuestro país en una bandera más de la bandera estadounidense.

-Quienes son herederos de los que ayer trajeron un príncipe austriaco para gobernarnos y hoy a un Aznar español para decirnos a quién elegir.

-Quienes siempre han tenido en la mira acabar con el laicismo.

-Quienes ven el poder público como una empresa y que, al ocuparlo-aún con pésimos resultados-, se recetan salarios y prestaciones como gerentes de Primer Mundo.

-Quienes son practicantes de virtudes públicas y vicios privados.

-Quienes nunca han tenido principios, sino intereses.

-Quienes anhelan privatizar los bienes públicos que aún nos quedan.

-Quienes siempre han añorado el “orden y progreso” porfiristas.

-Quienes quisieran poder censurar toda expresión artística y literaria cuando atenten contra su moral y buenas costumbres.

-Quienes quisieran reescribir la historia nacional para dar lugares preeminentes a: Iturbide, Santa Anna, Miramón, Mejía, Porfirio Díaz, Gómez Morín… y desbancar a Hidalgo, Morelos, Juárez, Zapata, Cárdenas…

-Quienes ejemplifican el “respeto irrestricto” que conceden al voto ciudadano con las “concertacesiones” de Baja California, Guanajuato, etcétera.

-Quienes dejaron plasmada su “calidad moral” y su “ética política” en el trueque Amigos de Fox por el Pemexgate…y aquí no ha pasado nada.

-Quienes son paladines de la macroeconomía y la globalización aunque cada día se ahonde el abismo entre ricos y pobres.

-Quienes aplican la política económica de socializar las pérdidas y privatizar las ganancias, como en el FOBAPROA.

-Quienes celebran el hecho de que cada año crezca la lista de mexicanos entre los más millonarios del mundo.

-Quienes miden la moral por el largo de las faldas.

-Quienes quisieran legislar sobre lo que sucede debajo de las sábanas.

-Quienes en su fuero interno son fervientes admiradores de personajes como Franco y Pinochet, al punto de querer imitarlos.

-Quienes ciertamente se pronuncian también “por el bien de todos”, pero con una variante: “Por el bien de todos: primero los ricos, los empresarios, el gran capital”.

Roberto Ramírez Pérez